¿Te has sentido desfallecer tras la ausencia de alguien a quién amas con todas tus fuerzas, y has dejado de lado esas cosas que tanto te apasionan porque ya no les sientes el mismo placer? Pues bien, si la respuesta es afirmativa, ¡Parque Mágico te conviene y mucho!
Parque Mágico tiene buena animación, la imagen y sus detalles son para destacar, cuenta con voces de actores como Matthew Broderick, Jennifer Garner y Ken Hudson Campbell quienes interpretan personajes entretenidos y de carácter.
Al inicio parecía que la trama me iba a aburrir, porque da la impresión de ser una historia simple y quizá recurrente en otras películas infantiles animadas.
Sin embargo, me enganchó cuando empezó a ser más fluida y para serte sincera, muchas veces la magia no está en contar historias diferentes, si no en contarlas con emoción, porque las emociones siempre se llamarán de la misma forma.
Sinopsis
Se trata de la historia de June, una niña con grandes habilidades creativas que un día encuentra por casualidad un asombroso parque de atracciones llamado Wonderland en el que habitan animales parlanchines. Pero el único problema es que el parque está en caos. June pronto descubre que el parque proviene de su imaginación y que es la única que lo podrá salvar, así que se une con los animales para salvar a este mágico lugar y devolver la magia a Wonderland.
“No te entregues a la oscuridad, tu luz es más fuerte”
June, la niña protagonista de Parque Mágico, debe afrontar el duelo con todas sus etapas: negación, tristeza, culpa, miedo y sobre todo ira.
Pero cuando encuentra Wonderland, descubre que debe soltar para dejar brillar la luz que está en su interior, aprende que quizá la oscuridad no desaparece y suele estar por ahí, para recordarle que debe sacar provecho a la luz que la rodea.
Te podría interesar: ¿Qué es la capa de Ozono? (Explicación para niños)
A mí, me movió fibras
Cuando empecé a escribir este tipo de reseñas, me di cuenta que en cada una hacía catarsis. Comencé a liberarme de miedos, o por lo menos a decirlos y eso ya es ganancia.
A los 15 minutos de iniciar Parque Mágico, me hallé llorando de manera inconsolable y rogaba al universo que Jake siguiera tan concentrado, que no le diera lugar a preguntarme el porqué estaba así.
Sentía que la vida era extraña, me preguntaba sobre qué tan preparados estamos como familia ante un altibajo de salud, o para cosas fortuitas como un accidente en el que uno de sus padres le pueda faltar.
Entendí que la vida es frágil: cada segundo que avanza, estamos expuestos a un sin número de situaciones en las que corremos riesgo sin proponérnoslo. Pero eso no es obstáculo para dejar de hacer la cosas porque lo que realmente cuenta, son los momentos, esos que le dejamos a nuestros hijos y sin darnos cuenta, serán en algún momento su mayor motor.
Bonito día gente bonita. Si van a ver la peli, háganme saber cómo les fue y qué sintieron.
Trackbacks / Pingbacks